HISTORIA DEL KARATE II

HISTORIA DEL KARATE-DO (TOTE)

(TOTE = LLAMADO SIMPLEMENTE TE = MANO) 

 

Las formas básicas de defensa personal son probablemente tan viejas como la raza humana, el arte del karate puede ser buscando directamente hasta la antigua técnica de Okinawa - Te, a su vez el Okinawa - Te desciende del antiguo arte chino “Chivan - Fa o Kempo”.

 

El renombrado monje budista de la India Daruma Taishi, viajo por tierras de la india hasta China para instruir al Monarca de la “Dinastia liang” sobre el budismo. Daruma permaneció en China en el Monasterio llamado Shao Lin - Szu y enseño budismo a los monjes chinos, de tal modo que les enseño un sistema físico-mental que con el tiempo les dio la reputación de ser luchadores formidables en china, formando posteriormente la base para el actual deporte nacional de china.

 

Okinawa, es la isla principal de una serie de islas llamadas Ryukyu en el mar oriental de china dentro del océano pacífico, desde tiempos remotos Okinawa estuvo en comunicación con China y Japón, siendo probable que el Kempo haya sido importado con otros elementos de la cultura china.

 

Hace aproximadamente 5000 años, el Rey Hashi de la Dinastía Sho de Okinawa, consiguió unir las Islas Ryukyu en un solo Reyno, para asegurar su gobierno confisco todas las armas, pero alrededor de 200 años más tarde, Okinawa se convirtió en parte del dominio del Clan Satsuma de Kyushu y por segunda ocasión todas las armas fueron confiscadas. Se dice que como resultado de estas prohibiciones en el uso de las armas, el Okinawa - Te tuvo un gran auge, (Okinawa – Te, es el arte de la defensa con la mano vacía).

 

En el año 910, Japón cierra las fronteras con China y Okinawa, sumergiéndose en una edad media hasta a mediados del siglo XIX, este aislamiento contribuyo a crear un estilo de lucha propio y diferente a sus orígenes chinos, especialmente el de la isla de Okinawa.

 

Años después, con la llegada de los Japoneses o Señores de la Guerra a Okinawa, su desembarco y conquista en la isla fue el prologo más sangriento de una ocupación feroz.

 

Los Samurais Japoneses impusieron una ley de fuego y muerte, desarmando a todos los habitantes y llegando a tal punto que se cuenta que en cada pueblo no había más que un solo cuchillo que se encontraba encadenado a un palo en el centro de la plaza, y junto a este un centinela de día y de noche.

 

Okinawa (1609), como muchas islas que pertenecieron a China, poblada por habitantes pacíficos y amantes de las artes marciales, ante la llegada de los señores del Japón y la severidad del clan, tuvieron que buscar en las artes marciales nuevas facetas que les permitirán defenderse.

  

Por una parte se iniciaron en el arte de combatir sin armas, con las manos y los pies, así fue como inventaron una nueva técnica que recibió el nombre de “Te”.

 

Este arte fue practicado más tarde por los japoneses y ampliado con las técnicas del primitivo Kung - Fu se convirtió en el famoso “Karate”, tomado estas últimas partículas de la forma de combate descubiertas por los habitantes de Okinawa.

 

Naturalmente el “Te” no era un arte efectivo ante los japoneses armados hasta los dientes, por eso, los isleños estudiaron las lucha con armas, pero como no poseían ninguna, tuvieron que inventarlas, fué así que se sirvieron de los instrumentos de trabajo, dándoles la forma apropiada para que pudiera servir a su nueva ofensiva misión, utilizaron herramientas de labranza como:

 

Le Kon = Bastón largo

El Sai   = Especie de machete

El Tonfa = Dos largos bastones, utilizados para desconchar cereales.

El Nichogama = Dos hoces unidas por una cadena.

El Nunchaku = Dos bastones cortos unidos por un trenzado de crines de caballo, se usaba para machacar el trigo o arroz.

 

Ni siquiera la familia de un karateka sabía que este practicaba dicho arte durante esta época debido a la severidad de los japoneses, por lo que se practicaba en secreto. Esta situación persistió hasta 1905 cuando la Escuela Normal de Shuri y la Primera Escuela Media Perfectual adoptaron el karate como una materia oficial dentro de la educación física.

 

A principios del siglo actual, resurgen las artes marciales, entre ellas el karate, como una disciplina mental-corporal con una base espiritual zen en su sistema de enseñanza.

 

En 1917 Gichin Funakoshi fue el primer experto en introducir el karate en Japón, reafirmándose como tal en 1922 al dar una exhibición en Tokio ante una Comisión del Ministerio de Educación, con tal éxito que se decide su inclusión como parte obligatoria en la enseñanza normal dentro de las universidades.

 

El Tote se llego a conocer como Karate-Jutsu, y desde aproximadamente 1929 Gichin Funakoshi emprendió la revolucionaria iniciativa de apoyar fuertemente la idea de que el nombre se cambiara a “Karate Do”. De esta manera, el karate se transformaría tanto en apariencia como en contenido, partiendo su base desde las técnicas de Okinawa hasta convertirse en un nuevo arte militar Japonés.

 

No fue posible cambiar el nombre con facilidad, es con la publicación de “Karate Do Kyohan” (por el maestro Funakoshi) en 1935, que el karate se estableció firmemente y dos años después varias sociedades de karate de Okinawa se unieron a lo que sería la Asociación de Artes Militares del Japón.

 

El maestro Gichin Funakoshi nació en Shuri, Okinawa en 1869, fundó la escuela Shotokan y en 1948 fundó la Asociación de Karate de Japón del cual era Instructor en Jefe, se le considera el “Padre del Karate Moderno”, falleció en abril de 1957 a los 88 años de edad.

 

(Historia antigua extraída de un libro, es solo informativa, por lo que si tuviere errores de fechas, favor de enviar su comentario para corrección y enriquecimiento histórico).